lunes, 5 de marzo de 2012

El zorro


Sin duda es uno de los animales que más me atraen. Es protagonista de de relatos como los que a continuación mostramos. Sacados de “Selección de Fábulas de Don Félix Mª de Samaniego”. Dalmáu Carles, Pla, S. A. Gerona, 19 de julio de 1927.


La zorra y el busto
Dijo la zorra al busto,
Después de olerlo:
Tu cabeza es hermosa,
Pero sin seso.
Como éste hay muchos,
Que, aunque parecen hombres,
Sólo son bustos.


El león y la zorra
Un león, en otro tiempo poderoso,
Ya viejo y achacoso,
En vano perseguía hambriento y fiero,
Al mamón becerrino y al cordero,
Que, trepando por la áspera montaña,
Huían libremente de su saña.
Afligido de hambre a par de muerte,
Discurrió su remedio de esta suerte:
Hace correr la voz de que se hallaba
Enfermo en su palacio, y deseaba
Ser de los animales visitado.
Acudieron algunos de contado;
Mas, como el grave mal que le postraba
Era un hambre voraz, tan sólo usaba
La receta exquisita,
De engullirse al Señor de la visita.
Acércase la zorra de callada,
Y a la puerta asomada,
Atisba muy despacio
La entrada de aquel cóncavo palacio.
El león la divisó, y en el momento
Le dice: - Ven acá, pues que me siento
En el último instante de mi vida.
Visítame como otros, mi querida.
-¡Como otros! ¡ah señor! He conocido
Que entraron sí, pero no han salido;
Mirad, mirad la huella;
Bien claro lo dice ella;
Y no es bien el entrar dó no se sale.
La prudente cautela mucho vale.


La zorra y la gallina
Una zorra cazando,
De corral en corral iba saltando:
A favor de la noche, en una aldea,
Oye el gallo cantar; maldito sea.
Agachada y sin ruido,
A merced del olfato y del oído,
Marcha, llega, y oliendo a un agujero,
-Este es, dice; y se cuela al gallinero.
Las aves se alborotan, menos una,
Que estaba en cesta como un niño en cuna,
Enferma gravemente.
Mirándola la zorra astutamente,
Le pregunta: - ¿qué es eso, pobrecita?
¿Cuál es tu enfermedad? ¿Tienes pepita?
Habla: ¿Cómo lo pasas, desdichada?
La enferma le responde apresurada:
-Muy mal me va, señora, en este instante,
Muy bien si usted se quita de delante.
Cuántas veces se vende un enemigo,
Como gato por liebre, por amigo;
Al oir su fingido cumplimiento,
Respondiérale yo para escarmiento:
Muy mal me va, señor, en este instante,
Muy bien, si Usted se quita de delante.


La zorra y las uvas
Es voz común, que a más del mediodía
En ayunas la zorra iba cazando:
Halla una parra, quédase mirando
De la alta vid el fruto que pendía.
Causábale mil ansias y congojas
No alcanzar a las uvas con la garra,
Al mostrar a sus dientes la alta parra
Negros racimos entre verdes hojas.
Miró, saltó, anduvo en probaturas;
Pero vió el imposible ya de fijo.
Entonces fue cuando la zorra dijo:
No las quiero comer: No está maduras.
No por eso te muestres impaciente,
Si se te frustra, Fabio, algún intento:
Aplica bien el cuento,
Y dí: No están maduras, frescamente.


Se le suele atribuir algunas características humanas como la astucia y la inteligencia. Pero también se le suele hacer responsable de la mayoría de los males del campo. No es raro que la forma más fácil de verlo sea como aparece en la foto final de esta entrada.

1 comentario:

  1. Muy buenas fotos antes las veía más a menudo ahora hace mucho tiempo que no veo una y espero no verlas como la del final del cuento.

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